El novillero alicantino Alejandro Esplá se recupera lentamente de la grave cornada sufrida el pasado jueves en Arnedo, cuando se tiró a matar al quinto ejemplar de Miranda de Pericalvo. Los doctores han retirado esta mañana el último de los drenajes de la herida "y la semana que viene me quitarán los puntos" asegura el torero.
Alejandro confiesa estar "muy bien, sobre todo de ánimo. Ahora ya, en unos días, puedo empezar a pasear un poco, aunque no tengo prisa. No quiero apretar ni acelerar el proceso, aunque yo creo que en unos quince días podré empezar a entrenar. Lo bueno es que ha sido la última novillada del año y ahora no hay prisa", explica el novillero a Burladero.com
Esplá habla de la cornada y asegura que "ha sido fuerte, aunque por suerte no he sentido dolor, simplemente molestias", explica. Sus allegados aseguran que, cuando fue por la espada, aseguró que el toro no se le escapaba, y pagó el precio de la cornada: "Cuando uno está haciendo las cosas bien, estaba en una feria de novilladas como Arnedo y se me habían ido tantos triunfos este año por la espada, no se me podía ir la oreja, o las dos orejas, de esta novillada", relata.
El alicantino reconoce que no se fue el triunfo, pero el precio pagado fue alto: "Bueno, este precio ahora se llama accidente laboral. Lo que pasa es que el de un dentista es menor que el de un torero, pero todo son las consecuencias de la profesión de uno", apunta el torero.
Alejandro mira hacia atrás y hace un repaso de la temporada. "Ha sido bonita, muy bonita. He estado en Valencia, Alicante, Algemesí, Barcelona, Arnedo, Nimes... ha sido bonita y muy importante, la verdad. Ahora hay que seguir trabajando duro, cada día más, porque vienen nuevos retos", explica.
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